¿Y ahora quién podrá detenerlo? ¿Chacarita, ya descendido, el domingo que viene? ¿Central, que pelea punto a punto para zafar de la Promo, y encima va a Quilmes? ¿Colón, tal vez en Santa Fe, pueda recuperar algo del brillo perdido en los últimos partidos? ¿El cansancio? ¿O nadie?
Estudiantes es una locomotora lanzada al título. Hace unos días agarró la punta, tras la derrota y el empate de los fugaces punteros Godoy Cruz y Argentinos, y ahora se sacó de encima a Independiente, que ya le mira la patente mientras el Pincha acelera al título. Desde los nombres, y momento de los rivales, encima, el equipo de Sabella saca tanta ventaja como cuando mueve la pelota en la cancha. Le quedan tres rivales de pésimas realidades: un Chacarita descendido, un Central que pelea el mango para zafar de la Promo y un Colón, de local, que naufraga en la mitad de la tabla. A Independiente, encima, el fixture no le guiña el ojo: Boca, Argentinos y Lanús. Mientras que Argentinos, además de recibir mañana a Gimnasia, luego tiene que jugar con San Lorenzo, el Rojo y Huracán. Y Godoy Cruz tiene que visitar a Central, recibir a Colón y cerrar con Arsenal.
Tal vez el cansancio sea el mayor rival de Estudiantes de acá al final del campeonato, apenas tres semanas, en las que el Pincha debe enfrentar un viaje largo y desgastante a México para jugar con San Luis de Potosí. Y luego la revancha, intercalado con la definición del Clausura. Apasionante.
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